Capítulo 48
“¿Ni siquiera Amella… lo sabe?“. Qué tan caótica debló ser su vida privada para no saber quién era el padre de su hijo.
“¿No es gracias a ustedes? ¿Cómo llegó a existir este niño y por qué Amelia terminó en la cama de un desconocido? Ustedes, la familla Gallego y la familia Suárez deberían ser los más Informados. Para arruinar a una mujer, no escatimaron en medios y ahora me preguntan quién es el padre del niño“. Damaso estaba algo irritado.
“Sr. Damaso, usted tiene un gran malentendido con nosotros. Nunca hemos hecho nada contra ustedes, ni nos rebajarlamos a hacerlo“. Fausto defendió a Wilson con cierto enojo.
Damaso soltó una risa fria. “La gente de la familia Gallego, todos por uno y uno por todos“.
“Aunque Amella haya sido engañada para tener a Lázaro, ¿cómo es posible que ni siquiera sepa quién es el hombre?“. Fausto preguntó enfadado.
Damaso no tenía ganas de explicarle a Fausto y se fue a buscar a Lázaro.
Justo Wilson salió con Lázaro en brazos.
Damaso se acercó y tomó al niño. “Gracias por lo de hoy, Sr. Gallego, devolveré el dinero. Dame un plazo“.
Wilson frunció el ceño, eran realmente hermanos, ese terco carácter de Damaso y Amelia era idéntico.
“El Gru
Grupo Gallego tiene una fundación benéfica y la situación de Lázaro cumple con los requisitos para solicitar ayuda. Ya le pedí a Fausto que te ayudara con los trámites, de ahora en adelante el tratamiento en este hospital será gratuito“, dijo Wilson de manera distante.
Damaso se quedó sorprendido y bajó la voz. “No aceptaremos favores de la familia Gallego… devolveré el dinero en dos meses, gracias Sr. Gallego“.
Dicho eso, Damaso se marchó con Lázaro en brazos.
Lázaro se apoyó en el hombro de su tio y miró fijamente a Wilson con ojos brillantes.
Realmente deseaba… que Wilson fuera su padre.
Wilson quiso decir algo más, pero viendo que Damaso estaba muy a la defensiva, no insistió.
“¿Encontraron a Amelia?“.
Fausto negó con la cabeza. “Amelia no usó documentos de identidad para comprar un pasaje, y Bella Maravilla es muy grande, si ella quiere esconderse, realmente será difícil encontrarla“.
“¿Quién le pegó a Lázaro en la cara?“, preguntó Wilson.
“Valentino fue esta mañana temprano al taller de Damaso, probablemente también fueron ellos quienes quemaron la casa, Lázaro también fue golpeado por Valentino…“. Fausto también estaba algo enfadado, por más profundo que fuera el rencor de Amelia con la familia Suárez y Horacio, no deberían desquitarse con un niño.
¿No era eso lo que cualquier persona normal pensaría? ¿Qué culpa tenia un niño?
Pero Valentino fue tan impulsivo que le pegó a Lázaro.
“Recuerdo que advertí a la familia Suárez, yo llamé a la policia, les dije que no molestaran a Amelia“, la voz de Wilson era grave.
Fausto sabia que Wilson estaba enfadado, y no era poca cosa.
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Capitulo 48
La familia Suárez, sin duda, iba a sufrir las consecuencias.
En la casa de la familia Suárez.
“¿Carolina todavía no ha despertado?“.
“El médico dijo que Carolina recibió un shock, está mal de salud, aún no ha sido operada…“. Lourdes estaba llorando sentada en el sofá. “¿Por qué mi hija tiene tan mala suerte? ¡Todo es culpa de esa Amelia, ella llamó a la policia para difamar a Carolina, quiere matarla, su corazón es muy malvado!“.
Ezequiel estaba sentado con el rostro tenso y preguntó con una voz frla. “¿Dónde está Amelia?“.
“Papa… Amelia se escapó“, dijo Valentino al entrar en la sala de estar, estaba visiblemente nervioso.
“¿Se escapó? ¿No habla ordenado para que se la llevaran? ¿Cómo es que se les escapó?“. Ezequiel preguntó con severidad.
Valentino desvió la mirada por un momento antes de hablar en voz baja. “Fui a buscarla a la casa de Damaso, ella no estaba, así que mandé a golpear a Damaso, quizás eso la alerto y huyo“.
Valentino había ido temprano en la mañana con la intención de ahuyentar a Amelia, si podía… Que huyera y jamás volviera a Bella Maravilla, si regresaba seguramente moriría.
Ezequiel estaba decidido a matarla.
“Valentino, Carolina es tu hermana“. Lourdes recordó con la voz entrecortada.
“Por eso sugiero que busquemos primero a un voluntario para donar un riñón, y cuando Carolina esté mejor, entonces buscaremos a Amelia para que pague por sus errores. Ahora se ha escondido y no podemos encontrarla, si retrasamos el tratamiento de Carolina, seria malo“. Valentino trató de tranquilizar a Ezequiel y a Lourdes.
“Hmph, su vida le pertenece a Carolina, ¿de quién más vamos a usar si no la de ella?“. Lourdes no estaba de acuerdo. “El director dijo que el estado de salud de Carolina es aún muy débil y no puede someterse a una cirugia de trasplante en el corto plazo, así que todavia tenemos tiempo. Debemos encontrarla dentro de un
mes“.
Valentino guardó silencio y asintió después de un largo momento. “Bien, me aseguraré de traerla de vuelta“. “¡Señor! ¡Señora… hay problemas en la compañia!“, el asistente irrumpió en la sala. “Señor, el Grupo Gallego de repente canceló el proyecto de cooperación con la familia Suárez en San Lorenzo. Con su retiro, nuestro flujo de capital se ha detenido… podemos manejar los otros asuntos, pero si no podemos pagarles a los trabajadores, se retrasará el proyecto y si no entregamos a tiempo, la multa por incumplimiento…“.
Serla astronómica.
La expresión de Ezequiel cambió al mirar a Valentino. “¿El Grupo Gallego? ¿Has preguntado si hubo algún error? Los Suárez y los Gallego tienen un lazo matrimonial, Carolina es la prometida de Horacio. ¿Quién del Grupo Gallego es tan clego y se atrevió a romper la cooperación con los Suárez?“.
“Es… es el director ejecutivo, Wilson…“, el asistente tomó una profunda respiración y habló con voz baja.
